RELACIÓN DE EQUIPOS Y ENTRENADORES 13/14

¿QUÉ HACER PARA MEJORAR LA AUTOCONFIANZA DE MI HIJO/A?

A veces nos encontramos con que el niño/a, a pesar de sus buenas capacidades para desenvolverse en el fútbol, no tiene esa confianza necesaria para poder disfrutar del partido o del entrenamiento porque resulta estar más pendiente de su miedo a fallar que a mejorar gracias al juego con sus compañeros.

En ello tenemos que ver y mucho los padres y los entrenadores. Por ello, hemos querido dejar estos 7 puntos orientativos para que podáis entender cómo afecta vuestra forma de actuar en la autoconfianza del futbolista para así poder mejorar cada vez más:

1. Antes de comenzar, es muy importante saber exigir lo justo a un hijo/a, ya que es la base del desarrollo del niño. Generalmente, aunque lo pensemos, los niños no funcionan bajo presión. Lo único que estamos haciendo en tal caso es cohibirlo y conseguir que haga las cosas “porque me lo dicen mis padres” y no se sentirá tan feliz y tan satisfecho consigo mismo que un niño que haya hecho algo “porque mis padres me lo aconsejaron y yo he querido hacerlo”.
2. Para cumplir lo anterior, emitir una valoración de los niños en cada acción que hagan sería un ejemplo de presión. Dejémosle que actúe y si queremos corregir algo, no valores su actitud, trata de que comprenda cómo se debe hacer bien (refuerzos positivos). Avasallamos a los niños a consejos, dejémosle que él tenga la iniciativa.
3. Es muy importante que el niño no se sienta que cada partido o entrenamiento es un juicio. LO MÁS IMPORTANTE PARA LOS NIÑOS ES SU DESARROLLO DEPORTIVO, INDEPENDIENTEMENTE DEL RESULTADO DEL EQUIPO EN CADA PARTIDO.
4. Nos equivocamos si sólo premiamos tras un resultado a favor. Premiarle por su esfuerzo, constancia y trabajo es más importante y está más acorde con el éxito deportivo que hacerlo por un simple resultado.  Tu actitud respecto a tu hijo debe ser siempre la misma, independientemente del resultado deportivo que obtenga.
5. No seas monótono en las conversaciones con el niño/a. Muchas veces nos resulta difícil cambiar de tema si es algo que nos preocupa (como por ejemplo su rendimiento en el terreno de juego), pero no dejar que el niño desconecte puede hacer que aumente su inseguridad debido al enorme estrés al que está sometido durante toda la semana. Por ello, trata con él otros temas distintos: el colegio, los amigos… incluso sobre su serie de televisión preferida.
6. Sé flexible con él. Hay veces que nos olvidamos que son niños y como tal habrá días que no puedan o no sepan dar el máximo de sus posibilidades. El controlar eso también está dentro de su aprendizaje. Compréndelo y apóyale.
7. Por último, algo que pocas veces nos paramos a pensar: “Mi hijo/a es mejor que el otro” “Este niño es el mejor del equipo, fíjate bien en él, hijo”… son típicas este tipo de frases y no nos damos cuenta que debemos valorar a los niños/as en función de sus posibilidades, comprarlos hace que le estemos poniendo techo a su desarrollo, tanto para bien como para mal.

Ya lo dice Patricia Ramírez (Psicóloga. Experta en deportistas de élite): <<El niño, cuando practica un deporte no tiene que rendir, tiene que disfrutar con sus compañeros>>; <<Si damos unas directrices contrarias a lo que pide un entrenador puede afectar a la salud de nuestro hijo>>; <<Un padre solo tiene que hacer una pregunta después del partido: ‘¿cómo te lo has pasado?’>>.